será de lo más sencillo.
Durante los recorridos y paseos que el viajero puede hacer para
admirar los monumentos, conocer la ciudad y hacer compras, encontrará a
cada paso todo tipo de restaurantes, cafés, tabernas y cervecerías
típicas. Muchos de estos establecimientos tienen una larga historia, y
en muchas ocasiones ocupan lugares históricos o con encanto. Las
tiendas especializadas en comida rápida están a la orden del día; en
este sentido, las especialidades de la ciudad son los conocidos
una especie de tortilla frita cocinada con una masa de patatas
ralladas en crudo, posteriormente condimentadas.
El resto de la gastronomía tiene mucho que ver con la cocina
austriaca; lo más característico son las
carnes en salsa,(podemos
encontrar en muchos sitios el tradicional goulash húngaro) además del
delicioso
jamón de Praga. Entre los platos más típicos
están las
knedlíky (albóndigas hechas a base
de pan o patatas) y la
chocroute (col
fermentada típica de la cocina alemana). Hay también gran variedad de
sopas y platos fríos, como
el hígado de bacalao, el lenguado
ahumado o los huevos rellenos. Los postres son estupendos, con
mención especial a las tortitas rellenas de chocolate, frutas o nata, a
modo de crepes dulces. La bebida más consumida en Praga es la cerveza
Karlovy
Vary, famosa en todo el mundo por su calidad y su bajo
precio, así como la
Pilsner Urquell.
Además, también se producen licores, como el
Becherova (de
hierbas) o el
Slivovice (aguardiente de ciruela).
De entre sus muchos restaurantes queremos destacar:
U Pinkasu ( Jungmanovo namesti, 16 -
Praga 1): A unos pocos pasos de la Plaza de Wenceslao se encuentra U
Pinkasu, un restaurante típico checo y el primero de Praga en servir
Pilsner Urquell. La cerveza se sirve de modo tradicional en las tres
plantas del restaurante.
Cervecería U Fleku (Kremencova, 11,
Praga 1 – Nove Mesto): La más antigua y conocida cervecería de Praga,
que data de 1.499. Fabrica la famosa cerveza negra Flek 13. Incluye un
restaurante al aire libre.
Rusalka (Na Strouze, 1): Junto al teatro
Nacional, este local suele ser frecuentado por la bohemia checa. La
comida es casera, y el precio, más que razonable.
U Zelene Zaby (U Radnice, 8): Un local a
medio camino entre pub y restaurante, que tal vez ofrezca la mejor
carne de toda Praga, además de una bodega envidiable. Para el que le
gusten las historias tenebrosas y las leyendas, es imprescindible una
visita a este local.